viernes, 23 de noviembre de 2007

Una solicitud obligada


En 1876, el 7 de julio, a las 8 1/2 de la noche, escribí una pieza. Si a mis adversarios les place conocer su contenido, pues aquí está. La someto al juicio de la sociedad y la prensa.

¡La muerte equina prematura
o la generosidad del pueblo ruso!
Esbozo dramático en 1 acto

Personajes:
Liúbvin, joven.
Condesa Fínikova, su amante.
Conde Fínikov, su esposo.
Nil Yegórov, cochero Nº 13326
La acción transcurre a plena luz del día en la Avenida Niévskii.

Escena I

(La condesa y Liúbvin van con el cochero Nil Yegórov).
Liúbvin (abrazando). ¡Oh, cómo te quiero! Pero, de todas formas, no voy a estar tranquilo, hasta que lleguemos a la estación y nos sentemos en el vagón. Mi corazón siente, que el canalla de tu marido se lanzará ahora en nuestra búsqueda. Me tiemblan las piernas. (A Nil). ¡Ve más rápido, diablo!
Condesa. ¡Pronto, cochero!, ¡pégale pues con el látigo! ¡No sabes ir, hijo de gallina!
Nil (azotando al caballo). ¡Bueno!, ¡bueno, apestado! Los señores van a agregar para el té.
Condesa (grita). ¡Así dale! ¡Así dale! ¡Calienta a esa basura, si no vamos a llegar tarde al tren!
Liúbvin (abrazando y extasiado con su belleza celestial). ¡Oh, mi querida! ¡Pronto, pronto ya será la hora en que me vas a pertenecer por entero, y en absoluto a tu marido! (Echando miradas atrás, con horror). ¡Tu marido nos alcanza! ¡Lo veo! ¡Cochero, arrea! ¡Pronto, miserable, cien diablos por tu cuello! (Zurra a Nil por la espalda).
Condesa. ¡Por la nuca dale! Espera, yo sola con la sombrilla... (Zurra).
Nil (azota con todas sus fuerzas). ¡Bueno!, ¡bueno!, ¡muévete, anatema! (El caballo extenuado cae y muere).
Liúbvin. ¡Se murió el caballo! ¡Oh horror! ¡Nos va a alcanzar!
Nil. Mi pobre cabecita, ¿con qué pues voy a comer ahora? (Cae ante el cadáver del caballo querido y solloza).

Escena II

Los mismos y el conde.
Conde. ¿Huyen de mí? ¡Espera! (Agarra a la mujer por la mano). ¡Traidora! ¿Acaso no te quise? ¿Acaso no te di de comer?
Liúbvin (pusilánime). ¡Salgo pues pitando! (Corre bajo el alboroto de la multitud reunida).
Conde (A Nil). ¡Cochero! La muerte de tu caballo salvó mi hogar de la vejación. Si no se hubiera muerto de repente, pues no hubiera alcanzado a los huyentes. ¡Aquí tienes cien rublos!
Nil (magnánimo). ¡Noble conde! ¡No me hace falta su dinero! ¡Para mí será suficiente recompensa la conciencia, de que la muerte de mi querido caballo sirvió para preservar los fundamentos familiares! (La multitud exaltada lo aprueba con la cabeza).

Telón

En 1886, el 30 de febrero, esta pieza mía fue interpretada en la orilla del Lago Baikál1, por los amantes del arte escénico. Entonces yo me apunté como miembro de la Sociedad de escritores dramáticos, y recibí del tesorero A.A. Máikov el honorario pertinente. No escribí ninguna pieza más ni recibí ningún honorario.
Así, siendo miembro de la Sociedad nombrada y teniendo los derechos otorgados por ese título, exijo con insistencia en nombre de nuestro partido que, en 1er lugar, el presidente, el tesorero, el secretario y el comité me pidan disculpas públicamente; en 2do, que todos los funcionarios enumerados sean balotados y sustituidos por miembros de nuestro partido; en 3ro, que sean asignados anualmente 25 mil del presupuesto anual de la Sociedad a la compra de billetes de la lotería de Hamburgo, y que cada premio se divida entre todos los miembros por igual; en 4to, que en las asambleas generales y urgentes de la Sociedad se toque música militar y se sirva un entremés decente; en 5to, ya que toda la ganancia de la Sociedad ingresa a favor sólo de esos 30 miembros, cuyas piezas se ponen en provincia, y ya que los restantes 390 miembros no reciben ni un grosh, puesto que sus piezas no se ponen en ningún lugar, en aras de la justicia y la igualdad de derechos, gestionar ante el gobierno superior que sea prohibido a esos 30 miembros poner sus piezas, y con lo mismo romper el equilibrio tan necesario para la marcha normal de las cosas.
En conclusión considero necesario advertir que, si siquiera a alguno de los puntos señalados prosigue una respuesta negativa, me veré obligado a quitarme de encima el título de miembro de la Sociedad.
El miembro de la Sociedad de escritores dramáticos y compositores de óperas2

Akákii Tarantúlov.

De la redacción. Al incluir esta declaración del honorable miembro de la Sociedad de escritores dramáticos y compositores de ópera, abrigamos la esperanza de que ésta despierte la absoluta simpatía, al menos, de la mitad de los venerables miembros de esa Sociedad, cuyos méritos son tan grandes como los méritos del sr. Akákii Tarantúlov. La dramaturgia rusa es, precisamente, un importante género de poesía, donde Akákii Tarantúlov puede alcanzar una gloria imperecedera desde los glaciales arrecifes finlandeses hasta los bastidores ardientes, desde el Kremlin estremecido hasta el parloteo de las asambleas generales de la Sociedad de escritores dramáticos y compositores de ópera…

1Baikál, lago de Rusia, en Siberia meridional, en los confines de Mongolia.
2Chejov escribe a Alexánder Suvórin el 17 de abril de 1889: “He sido elegido para el comité de la Sociedad de escritores dramáticos. No espere nuevas reglas. No espere esas reglas mientras en la Sociedad hablen y protesten más que todos ésos, que están menos interesados en los asuntos de la Sociedad. Le envío una pequeña tontería dirigida contra los sediciosos quienes, si darles rienda suelta, disiparán la Sociedad. Si le sirve, publíquela en lugar del “sabadito” o como quiera, y si no le sirve, pues la enviaré a La gaceta de Petersburgo”.

Título original: Vuinuzhdionnoe zayavlienie, publicado por primera vez en el periódico Novoe vremia, 1888, Nº 4721, sin firma.
Imagen: Ilya Repin, Portrait of the Composer Mikhail Glinka, 1887.