-¡Qué linda estás hoy, hermanita! ¡Qué bonita! ¡Tus ojos brillan con tanta inteligencia y bondad que, si yo fuera hombre, te convidaría con una cena cada día! ¡Te va tanto esa palidez, esa expresión triste en el rostro, esas lágrimas en las pestañas, que estoy dispuesta a ahogarte en champagne! ¡¿Por qué yo no soy un hombre?!
Título original: Podpis k risunku biez zaglavia, escrito para la revista Oskolki, 1884, y prohibido por la censura.
Imagen: Toulouse-Lautrec.
Título original: Podpis k risunku biez zaglavia, escrito para la revista Oskolki, 1884, y prohibido por la censura.
Imagen: Toulouse-Lautrec.